Rugby

El Club Pucará.

 

Pucará nació grande. Fundado el 12 de octubre de 1943 sus fundadores, guiados por Jorge “El Mono” Torres Viñas” miraron al sur para construir un Club de la nada. En sus primeros 10 años ganó un Campeonato de Tercera, uno de Segunda y dos de Primera, culminando la década ganándole al Seleccionado de Irlanda, primer triunfo de un equipo argentino sobre otro de ultramar. Instalado desde 1945 en la Finca “La Carmita” de Burzaco, los 129 fundadores, todos porteños provenientes del Club de Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, eligieron como nombre la voz quichua de Pucará, inspirados en las Obras Completas de Joaquín V. González que habla de “los pucaraes, fortalezas inexpugnables” y habla del “cóndor que habita en sus altas cumbres”. Ese es el origen del nombre mientras que los colores, se los debemos al diseñador del escudo, el por entonces estudiante de arquitectura Ricardo Frigerio, quién se dejó llevar por su fanatismo por San Lorenzo de Almagro, teniendo en cuenta también que, en plena Segunda Guerra Mundial, el rojo y el azul eran los colores que simbolizaban a la libertad. El Himno del Club los recogió en sus versos: “por tu rojo que es del fuego y por tu azul que es el del mar”.

 

Basta con observar las cada vez más numerosas divisiones infantiles y juveniles de rugby y hockey, la solidez de los planteles superiores de ambos deportes, las obras realizadas, la calidez del salón principal, las recepciones a los amigos de otros clubes, las diferentes “peñas” de jugadores, para palpitar que es uno de los clubes de rugby más importantes de la Argentina.

 

Desde Bernardo “Aitor” Otaño, legendario capitán de Los Pumas de 1965 hasta Bautista Delguy es innumerable la cantidad de jugadores de Pucará que han integrado e integran los Seleccionados Nacionales. Otaño decía que “el espíritu del Puma es indefinible, primero es una meta y luego el orgullo de sentirlo, de vivirlo. Es mucho más lo que representa para uno que la popularidad que te da. Uno se siente Puma toda la vida aunque ya no juegue más. Y todo eso se lo debo a Pucará”.

 

Jorge de Carli, Socio Nº 39, fue jugador de Primera y Presidente del Club entre 1973 y 1979, posibilitando que se realizara la primera gira a Europa de la División Superior en 1974.  Siendo el único Fundador sobreviviente así nos cuenta los primeros pasos del Club Pucará:

“Nos fuimos de Gimnasia y Esgrima porque queríamos un Club en que sólo se respirara rugby, que además de jugar se pudiera disfrutar de un tercer tiempo como le gusta a los jugadores. Se formaron cuatro Terceras, tres para la Unión y una para la Liga Católica. A “La Carmita” muchos venían en auto y otros – sobre todo los de divisiones inferiores- viajábamos en tren. No había ningún problema para viajar desde Constitución a Burzaco. Los trenes salían y llegaban a horario. Pensar que a pesar de que una parte de Pavón (desde Turdera hasta Burzaco) era de tierra, en auto tardábamos 45 minutos, la mitad de lo que se tarda hoy. El “Mono”  (Torres Viñas) es el gestor del Club Pucará, por el que hizo mucho, es más sin él, el Club no hubiera existido. Todas las reuniones se hacían en la casa del Mono. Pucará fue poco a poco convirtiéndose en un Club de la zona sur, en un grande del rugby argentino”